5 diferencias entre el trabajo social y los servicios sociales
15 de octubre de 2016 / 15 Comentarios
15 de octubre de 2016 / 15 Comentarios
El blog de Belén Navarro
20 de octubre de 2020 / 8 Comentarios
A veces los medios dan buenas noticias. Pocas. Supongo que dan respuesta a la creciente afición del ser humano por las malas noticias y por los desenlaces dramáticos. Ni el documental de la 2, que me encantaba ver, se escapa: cada dos por tres aparece un bebé oso perdido en el bosque o una foquita de pocos meses de edad sola sobre un témpano de hielo que flota a la deriva. Al final me acaban amargando la siesta, lo digo en serio.
Por eso creo que merece la pena detenerse sobre las buenas noticias. El congreso de los diputados ha aprobado la derogación de la esterilización forzada de personas con discapacidad. Una propuesta que CERMI lleva años peleando, sobre todo tras la adhesión por España de la Convención de Nueva York. Parece que por fin comienzan a notarse los efectos de la convención sobre el ordenamiento jurídico español. Ya era hora.
El ejercicio del cargo tutelar es muy complicado, mucho. Al elevado número de personas que las entidades tutelares atendemos hay que sumar la complejidad que entraña el acompañamiento en toma de decisiones con personas con discapacidad. En un tiempo y un espacio que normalmente no tenemos, además. Hay, por otra parte, demandas que implican un riesgo para la persona o para la entidad tutelar por lo que a veces obviamos algo tan importante como el derecho a equivocarse. Otras son, directamente, muy difíciles de gestionar. Una de ellas es la maternidad.
Se te abren las carnes cuando se presenta alguna mujer tutelada que quiere ser madre. Escuchas sus argumentos y acabas diciendo para tus adentros ¿Cómo vas a traer una vida al mundo si necesitas mucho apoyo para desarrollar la tuya? ¡Ay dios mío, qué ocurrencia! Podría mentir y escribir otra cosa más profesional y más ética, sin embargo es lo que se nos suele pasar por la cabeza a casi todas las personas que trabajamos en este sector. Esa es la realidad.
Pero esa complicada realidad no puede servir como excusa para evitar quebraderos de cabeza a las entidades tutelares. Como tampoco puede dar pie a prácticas que son una grave anomalía en términos de derechos humanos, tal y como dice expresamente la proposición de ley a la que me vengo refiriendo. Si las entidades tutelares están infra dotadas habrá que dotarlas y si hay que transitar hacia modelos más respetuosos que nos ayuden a mejorar la intervención también habrá que esforzarse en hacerlo. Lo que no es de recibo son soluciones como la esterilización forzada. Su derogación, aunque llegue tarde, es una gran noticia.
Por eso me alegra muchísimo que mi despedida temporal de la entidad tutelar coincida con este cambio legislativo. Regreso por un tiempo a los servicios sociales comunitarios en el medio rural. Echaré mucho de menos a Carmen, Juanma, María, Fernando, Encarna, Domingo, José... Cada una de estas personas brilla con luz propia entre las demás porque la entidad tutelar es, como el mundo, un montón de gente, un mar de fueguitos...
8 Comentarios
El «mar de fueguitos» me lleva a transitar por senderos del buen recuerdo. ¡Adelante el mar de fueguitos!
Desde mis catorce años de experiencia profesional (algo lejanos en el tiempo ya), aprecio el avance legislativo, veo la complejidad del «terreno» y reconozco el derecho a equivocarse. Habrá que seguir transitándolo…
¡Muchos ánimos para tu nueva etapa profesional! Un abrazo.
¡Muchas gracias, Carmen! Estoy ambivalente, por una parte me hace ilusión volver a los servicios sociales comunitarios y por otra me apena abandonar el mundo de la discapacidad. Un abrazo.
Buena noticia, a la espera de más.
Gracias 😊😃
¡Gracias! Un abrazo.
Que vivan esos fueguitos que parece que no están, pero están….. feliz vuelta! Y que viva el SIUSS😬……Besos
¡Ay omá, el SIUSS! Jjajjajaja, un abrazo, muchas gracias…
Bonita y tierna entrada de blog y despedida de tu importante tarea en ese campo de tanta comolejidad. Enhorabuena y feliz camino de retorno a los Servivios Sociales, Belén
Gracias, maestra.
PD. Ya me he acordado de lo que quería preguntarte, jjajajja.