5 diferencias entre el trabajo social y los servicios sociales
15 de octubre de 2016 / 15 Comentarios
15 de octubre de 2016 / 15 Comentarios
El blog de Belén Navarro
15 de marzo de 2020 / 8 Comentarios
La aparición de internet es una maravilla, es obvio. Como sabemos, este aluvión de información también acarrea sus inconvenientes, sobre esto escribí un artículo en la Revista de Treball Social por si te apetece leerlo; decía, entre otras cosas, que la sociedad de la información es asimismo la sociedad del desconocimiento. El fenómeno de la infoxicación a veces genera desapego hacia la información, la lectura y el análisis. El compañero José María Regalado ofrece una guía gratuita sobre un buen uso de internet. Puedes descargarla si te suscribes a su interesante página aquí.
Al grano. Primera idea: Suscríbete a una, solo una, revista electrónica de trabajo social. Afortunadamente son gratuitas, hay muchísimas y la mayoría son revistas de gran calidad científica. Voy a mojarme y recomendar dos: Cuadernos de Trabajo Social, de la Universidad Complutense y Alternativas, de la Universidad de Alicante. Ni siquiera hay que leerse la revista entera. Abres el sumario que te envían al correo y si te interesa algún artículo lo lees ¡Hasta la revista de Cáritas, Documentación Social, ha aterrizado en internet gratuita!
Segunda idea: Los boletines o newsletters. Al igual que con las revistas puedes suscribirte y te llega información concreta sobre temas que sean de tu interés. La mayoría de entidades del tercer sector los publican así que si trabajas con un colectivo concreto encontrarás el tuyo. Yo estoy suscrita a dos boletines de discapacidad y uno de salud mental.
Tercera idea: Plantéate leer un libro sobre trabajo social al año. Solo uno. Yo recomiendo elegir entre estos tres: Cuando el trabajo social es literatura por motivos evidentes, Epistemología del trabajo social y Por una acción social crítica, un librito que va a ser, en mi opinión, referente en intervención social.
Cuarta idea: Continuar la formación. Digo lo mismo que con los libros: Un curso, jornada o congreso al año. Elígelo bien. Siempre y cuando tu economía te lo permita, por supuesto, aunque hay cursos gratuitos. Me comprometo a buscar algunos ahora que tengo tiempo y compartirlos en facebook e instagram.
Quinta idea: Seguir un blog ¡Claro! No tiene por qué ser el mío, puedes suscribirte al blog del amigo Pedro Celiméndiz y su inseparable Wang, al blog, siempre riguroso, de Fernando Fantova o a No me pidan calma, de Xose Cuns, todos ellos muy buenos. Hay dos blogs colectivos catalanes que me gustan mucho (sus estilos son muy diferentes) Llei D´Engel y Àgora Treball Social. A veces traducen los textos y si no el traductor de google más o menos nos saca del atolladero. Que también te puedes suscribir al mío, vaya, si quieres. Ejem...
Estas son mis cinco ideas para estar al día en trabajo social. Si el confinamiento te tiene de los nervios, hay un programita de radio muy cachondo llamado El suañacóptero que realizan dos trabajadoras sociales. Su última edición está dedicada al coronavirus. También puedes escuchar el primer audio artículo de la revista del consejo de trabajo social o leer uno de los maravillosos relatos de la trabajadora social Silvia Navarro aquí. Son auténticas perlas. Te van a encantar.
Quiero finalizar enviando un cálido abrazo a las compañeras que, como yo, realizan servicios mínimos en sus centros de trabajo. En estos momentos de histeria generalizada hemos de ofrecer nuestra mejor versión como profesionales y como personas. Que nadie quede atrás, que nadie quede fuera. Hacer nuestro trabajo. Ni más ni menos. Ya está bien de tanta monserga con las heroicidades. De esto escribiré en mi columna de El Común porque estoy muy cabreada con esta competición que se ha montado por ver quién es más héroe.
Por encima de mi enfado lo que más me gustaría es que esta experiencia sirviese como reflexión acerca de las condiciones en las que viven millones de personas empobrecidas dentro y fuera del país ¿O es que ya se nos ha olvidado la visita de Philip Alston? Para ellas todos los días son días de emergencia, de supervivencia por culpa de un sistema que genera dinámicas asesinas de exclusión. Un sistema que nos ha convertido en fieras por conseguir un paquete de papel higiénico. Debería darnos vergüenza.
8 Comentarios
Gracias Belén por las recomendaciones! Yo también tengo esa sensación que much@s profesionales piensan que se escribe poco sobre Trabajo Social y simplemente no se conoce lo que existe. Y hay muchas opciones, desde los blogs a las revistas y, por supuesto los libros. Por cierto me apunto el último que recomiendas (Por una acción social crítica) que es el que me falta!
Totalmente de acuerdo con esa especie de competición heroica, no puedo menos que pensar que nos ha invadido el «virus» de las series americanas en las que cualquiera es un héroe. Reconocimiento total a l@s profesionales, a tod@s, pero no ahora, siempre!!
¡Qué alivio más grande, compañera, que compartas lo de la competición! A veces me siento una extraña. He escrito sobre el tema en la columna que tengo en el diario El Común, me da que me van a llover piedras. El librito de la acción social crítica verás que te va a gustar. Un abrazo fuerte y muchas gracias por comentar.
Me he topado con tu post en mi ínfimo intento de mantener la productividad desde el encierro. Me suscribo. Un abrazo fraterno desde Perú.
¡Me encanta conectar con personas de Latinoamérica! ¡Otro abrazo de vuelta, Natalí!
Qué genialidad y lucidez en esa cabeza!!
Lo q más me admira es la sencillez y claridad con la q expresas los temas, no por ello exentos de profundidad e incluso de humor.
Leer un poco de la profesión y de servicios sociales en general, nos ayuda a sondear caminos, a reflexionar, a salir de la vorágine y aprender a ejercer la profesión, esta bella profesión con más rigor y sabiduría. Sin más. No hay medallas, ni héroes, ni premios. Solo la satisfacción del trabajo bien hecho al lado de las personas. Perseguir alcanzar la profesionalidad, nada más. Gracias Belén.
¡Uau! Estos comentarios, inmerecidos, hacen más llevadero la «corona crisis». Qué bonitas palabras sobre la profesión, preciosas y certeras, sí señora.
Gracias Belén! Es estupendo tener más recursos de los que poder echar mano para continuar aprendiendo… por favor, sigue recomendando de todas estas cosicas… Un beso!
¡Muchas gracias! Seguiré recomendando. Gracias también por comentar.