5 diferencias entre el trabajo social y los servicios sociales
15 de octubre de 2016 / 15 Comentarios
15 de octubre de 2016 / 15 Comentarios
El blog de Belén Navarro
26 de diciembre de 2021 / 14 Comentarios
No ha sido mi mejor año. Además de la pandemia en sí, mi vida ha experimentado profundos cambios y he tratado de ir adaptándome a ellos. Es por eso que no he leído tanto como me gustaría ni tampoco he podido seguir algunos de mis programas culturales favoritos. Reconozco sin embargo que este año me ha proporcionado algunos descubrimientos y quiero compartirlos.
He descubierto lo mucho que sufren mis compañeras para mantener el ritmo de trabajo y compatibilizarlo con los cuidados, sean de personas mayores, adolescentes o pequeñetes. Desde fuera se ve con claridad meridiana. También he descubierto que para ejercer mi papel de manera digna debo revisarme continuamente. Ver lo que se tiene delante exige un esfuerzo constante; creo que lo dijo George Orwell. Qué razón tenía.
He descubierto que se puede vivir donde trabajas y no estar loca. Que cada vez aparecen más libros sobre trabajo social. El otro día se me ocurrió la idea perfecta para mi primer libro, que espero comenzar en enero. He descubierto ¡qué alegría! que no debo preocuparme por como serán las nuevas generaciones de trabajadoras sociales. Y que ¡horror! más pronto que tarde tendré que pensar en ir dejando este blog. En enero cumplo cincuenta años y la cifra me tiene bastante trastornada, la verdad.
Han llegado a mi vida las chicas de Deforme semanal ideal total, un podcast de Radio Primavera Sound sin el que ya no puedo vivir. Flamantes ganadoras del Ondas, oiga. Por otra parte Marta García se ha marchado de La Hora Extra y ya no es lo mismo. Odio la SER por eso, aunque les agradezco el somnífero para mis noches insomnes: Un libro, una hora. Es un gustazo dormirte acunada por la voz de Antonio Martínez Asensio.
Los descubrimientos de la radio son mi compañía ahora que vivo en soledad. Bueno, no tan sola en realidad, ahora que he descubierto que tres perros son mejor que dos a pesar de parecer una loca cada vez que los saco a pasear. Lío, Pili y Pingo son adorables. Me encantan los perros y siguiendo el hilo canino he descubierto que me encanta el perreo, sintonía del crossfit y del aquazumba, dos descubrimientos que son más bien la prueba de mi crisis de los cincuenta. Aún así, he redescubierto el deporte y me sienta bien.
He descubierto que tengo muchas cosas que agradecer: Mi suerte por contar con grandes amigas y amigos. Que mis padres siguen vivos y mi sobrino ha encontrado trabajo... Que todas las semanas muchas compañeras os asomáis a este espacio y encima hacéis comentarios. Y sobre todo que, tal y como están las cosas, vivir es un regalo.
Hablando de regalos quiero despedirme del año haciendo dos: Uno, un texto llamado Filosofia de la transformación social, que en realidad nos regala el compañero Francisco Javier Jiménez Gómez y dos, una lista que he confeccionado en Spotify con las canciones que han sonado en este blog durante 2021. Espero que la disfrutes.
PD. Estáte pendiente de mi cuenta en instagram. Para Reyes habrá un sorteo...
14 Comentarios
Hola Belen, este comentario es para darte la bienvenida al club de las cincuenteañeras y decirte que es un gustazo leer tu blog, que voy a ser egoista y pedirte que no lo dejes; escribe tu libro, pasea a tus perros, cuida y disfruta de los tuyos, perrea con el aquagym… pero sigue regalándonos tus posts tan certeros, tan bien escritos y que me permiten parar, pensar y creo que tambien mejorar. Lo dicho dejanos seguir soñando que otro Trabajo social es posible y muchisimas gracias por estar ahi y como decia Supertramp «Crisis? What crisis?» . Unha aperta.
¡Bueno, bueno! Teniendo en cuenta el tipo de integrantes que tiene este club no va a estar tan mal al final cumplir los 50 ¡Muchas gracias por tu palabras, de verdad! Un abrazo de punnnta a punnnta de Ehpáaña.
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Para mí el regalo has sido tú !!!!!!! y el descubrimiento: tu blog. Para mí a mis casi 75 años está suponiendo una puesta al día y un revulsivo para seguir trabajando por y para el Trabajo Social desde la retaguardia.
Entiendo que para ti el mantener el blog, estando. en activo, supone mucho trabajo y la vida es para disfrutarla.
El otro día escribía una amiga mía :» Tal y cómo está la realidad por aquí, ojalá no nos falten cumbres, sueños y libros para seguir avanzando.» URTE BERRI ON.
Amiga María Antonia, si tú a tus casi 75 años sigues en la lucha ¿Cómo no voy a seguir escribiendo yo a mis casi 50? No sabes la alegría que me producen tus palabras. Urte berri on para ti también, preciosa.
Gracias Belen por compartir tus descubrimientos.¡ Qué difíciles son los cuidados! Ojalá seamos capaces de valorarlos más y articular los cuidados de manera que no recaigan sólo en las mujeres.
¡Ay, los cuidados! Me pongo enferma cada vez que veo a mis compañeras haciendo malabares. Gracias a ti por comentar, amiga María ¡Feliz 2022!
Que alegría lo de libro, me alegro mucho, me ha encantado esta entrada, siempre descubro cosas nuevas y eso es muy gratificante. Felices días siempre!!!!
No dejes de escribir en el blog, porque nos ayuda a la reflexión y pararnos en el día a día para mejorar en nuestra profesión y calidad en el mismo siga aumentando que falta nos hace.
La alegría es mía al leer tu amables palabras. Escribo el blog para compartir mis reflexiones con vosotras, si no, no tendría sentido. Todavía me queda guerra por dar, sobre todo con lectoras tan bonicas como tú ¡Un abrazo y felices fiestas!
¿Se avecina libro? Bien
¿Dejar el blog? Ummm, más bien, Mal. (Espero que tardes en decidirlo)
Feliz año.
Jjajjajaja, sí, se avecina libro, aunque a final de 2022. El blog… pues aún no lo voy a cerrar, pero en algún momento tendré que planteármelo. Como digo, la crisis de los 50 me tiene trastornaaaaaaaaaaa.
Un fuerte abrazo, compañera de fatigas.
Feliz 2022!😘
¡Igualmente, compañera!
Hola, Belen:
Lo primero, feliz año 2022, por favor que el año nos trate bien, que somos buena gente.
No dejes de escribir, escribe el libro, pero no cierres el blog, sigo aprendiendo con tus reflexiones y además casi siempre me sacas una sonrisa.
La crisis de los 50 se pasa cuando cumples 51, lo importante es seguir cumpliendo.
Manuel Vicent tiene una columna que es una preciosidad “Brindis”. Búscala, creo que te va a gustar y solo con leerla se te va a pasar la crisis de los 50.
Un abrazo. Cuídate. Cheli
«Mientras el sol decline la luz para pudrir las hojas amarillas de otoño, si finalmente has conseguido no rendirte, obtendrás también tu propia cosecha, tal vez la brisa deliciosa de un amor, el deleite de las risas con los amigos, la gracia de un placer secreto que te conceda un dios pagano».
Qué preciosidad de artículo, Cheli, qué dominio de las palabras, cuánta belleza… Tomo nota y ¡A por los 51, jjajajajaj! Un fuerte abrazo virtual, ojalá algún día pueda ser real.