La mayor satisfacción que me regala día a día este blog es, sin duda, poder conocer a gente entregada al trabajo social por toda la geografía española. Muchas de estas personas además se han convertido en amigas, como Ania y Carmen, co fundadoras de AIRES. Se trata de una asociación que trabaja en Madrid la problemática del sinhogarismo desde el modelo housing first y también ofrecen formación. Están realizando un trabajo muy serio que merece la pena conocer, en cambio ellas no han querido publicitarse y han decidido escribir al son de Rosalía para cerrar el año 2018. Unas joyicas estas Aires, con solo un defecto: Son unas exageradas.
Como muchas que leéis este Blog, somos seguidoras y fans de “La Navarro”. Como a las grandes actrices, le precede el artículo al mentarla, así de importante es ella en nuestras trayectorias. Desde esta admiración, imaginad lo que significa para nosotras que nos haya invitado a cerrar el año en esta habitación tan suya y algo nuestra.Nuestro imaginario del Trabajo Social se arma en estos años con cada entrada de La Navarro, con cada palabra de
Wang y su amigo Pedro, con cada línea escrita o hablada con T. Zamanillo, con cada debate con todas y cada una de las compañeras que forman o han formado parte del
Foro ServSocial Madrid. También con Pau y
Manifestaos, con La Murillo y las compas de Asturies, con Afri, con La Salvador, con María… pero sobre todo con cada persona a la que hemos acompañado, con cada persona que hemos motivado en una acción pequeña de su vida, con cada persona con la que la hemos pifiado.Con las decisiones buenas y con las que con el tiempo se demostraron no tan buenas. Con cada impulso, con cada pulsión. Para nosotras la base de la profesión tiene que ver, necesariamente, con la pulsión. Trá trá.Si la situación estructural que nos rodea no nos mueve nada por dentro, vamos malamente. Si no vemos en su globalidad las consecuencias demoledoras del precariado -fruto de una estafa muy bien orquestada- en la vida de las personas con las que trabajamos, vamos malamente. Malamente, trá trá.Frena, para, tómate unos minutos para que el corsé de la organización en la que trabajas te deje respirar, piensa. Recuerda la pulsión que te llevó a elegir, de entre todas, esta profesión que persigue que las personas se relacionen con su entorno, con el mundo que les rodea, de forma digna y completa. Que se basa en la defensa de los Derechos Humanos, en el compromiso con las personas, en el respeto a su entidad como personas, con todo lo que son, lo que han sido, lo que tienen y de lo que carecen. El compromiso con su historia y el compromiso con el futuro que debemos construir con cada una de ellas, aunque no sea el futuro que tú hubieras prescrito.Piensa, ¿Cuánto conoces de la vida de las personas con las que trabajas? No de los hechos objetivos, de esos los conoces todos, sobre todo los que involucran una pérdida o una carencia. Queremos decir cuánto conoces de sus vivencias, cuánto de sus motivaciones. Qué les hace moverse, a qué le tienen miedo. Ése es el núcleo de lo que hacemos. A eso debemos decidir dedicar el mayor porcentaje de nuestro tiempo de trabajo.Para verificar que una persona cumple con unos requisitos X para una ayuda Y tú, compañera, no haces ninguna falta. Para recoger tiques que justifiquen si una persona ha gastado la ayuda de emergencia en tampones, cerveza o pan, tú, compañera, no haces ninguna falta. Para completar datos estadísticos y cuantitativos sobre la atención en tu centro, tú, compañera, no haces ninguna falta.¡Despierta!, porque el mundo que nos rodea está malamente, el entorno que nos expulsa es cada vez más complejo, las necesidades de las personas cada vez más globales e interconectadas y sus vivencias más precarias.¡Despierta!, porque tenemos un hueco, necesario, fundamental para apoyar al desarrollo de las personas, solas, en grupos o en comunidad. Pero nos lo estamos dejando arrebatar y cuando despertemos no estará ni el dinosaurio, ni el Plan Concertado ni el legado de Mary Richmond.¡Despierta!, fórmate en herramientas que te ayuden a acompañar esa construcción de futuro, herramientas que alimenten tu esperanza en que todas las personas pueden cambiar su situación, o a ellas mismas, hacia donde ellas quieran.¡Despierta! y ayuda a otras compañeras a despertarse.Construye tu relato propio para ir construyendo juntas un relato común.Hemos gritado mucho en las reuniones pero poco en las calles.Este es un momento buenísimo para cambiar el escenario de nuestros gritos, de nuestras demandas.Que nos oigan quienes deciden. Que nos oigan quienes planifican. Que nos oigan las personas a quienes acompañamos, seguramente muchas se unan. Recuperemos la calle para no perderlo todo.¿Quieres? Despierta. Trá trá.Carmen Belchí García y Ania Pérez de Madrid CarrerasCo fundadoras de AIRES
8 Comentarios
Bravo Aires!! Fenomenal entrada que nos toca bien adentro. Se nota vuestro compromiso en cada frase. Y a La Navarro, gracias también por mantenernos unidos en torno a este fuego profesional y personal que tanto nos calienta durante el año entero. Besos a todas, trá trá!!!
Gracias, como siempre, por comentar y feliz año, ojalá haya muchos espejos como tú donde ad-mirar.
"Y tú compañera, no haces falta…." me encanta es frase. Y es que si seguimos así nos cambiaran por cajeros automáticos de ayudas y ayuditas. Para lo que si haces (hacemos) falta, compañera, es para crear vínculos, acompañar y levantar la mano para decir: no estoy de acuerdo o tengo una idea. Sinergías, que manida expresión pero que necesaria su traducción. Cuanta generosidad leo en esta entrada. Feliz año
Toda tuya seguro que haces alguna reflexión mas brillante con ella
Efectivamente, amiga Paka, uno de los objetivos de este blog es generar sinergias, con lectoras como tú y amigas como "Las Aires". Por cierto, me ha encantado lo del brazo tonto del sistema, vamos, que te lo voy a robar en alguna entrada. Un abrazo y feliz año.
Gracias, Luis, por comentar. Es una alegría constatar que el trabajo social se encuentra en buenas manos, jóvenes, inteligentes y comprometidas ¡Feliz año!
Enhorabuena por vuestro artículo Aires y por las sinergias generadas en este Blog, Belen. Una entrada imprescindible para empezar el año movidito que empieza . Mas en este medio de los social donde no paramos de escuchar discursos desafinados políticamente o ruidosos sin mas. Que al menos las trabajadoras sociales no perdamos nuestro norte es vital para no seguir siendo el brazo tonto del sistema. Gracias por azuzarnos con ritmo y compás.
Geniales. Gracias por la entrada que me redirige de nuevo al sentido de lo que hacemos.